Obra Albaladejo, Madrid

La emoción de Carmen al ver por primera vez el loft (sus espacios diáfanos y las vistas de su gran terraza), fue el empuje de la familia para un cambio radical de vida juntos. El reto del loft fue hacer una casa acogedora, cómoda y que respetara la independencia de todos los miembros de la familia (matrimonio con 2 hijos ya mayores).

Con Carmen y Fernando, amigos de toda la vida, todo fue fácil.

La reforma del loft fue integral, se estudiaron los espacios y su amueblamiento con atención, de forma que fuera posible combinar la vida individual de cada miembro, y la vida común de todos. Las 2 zonas más especiales de la casa son el gran salón-comedor con cocina e isla central, y la gran terraza con pérgola. La decoración es funcional e intemporal a la vez. Los colores claros, el color marfil, el blanco y el toque cálido de la madera natural, junto con los grandes ventanales y la luz de esta preciosa casa hacen el resto.